La vida nos sitúa ante distintos retos que no siempre sabemos cómo superar. Ante las dificultades, ponemos en marcha toda una serie de respuestas que, en ocasiones, en lugar de ayudarnos a solucionar el problema, hace que éste crezca.
A través del trabajo con un experto podemos conseguir poner en marcha nuevos comportamientos, pensamientos o emociones, generando en nosotros los cambios necesarios para salir fortalecidos de estas situaciones.
El tratamiento aplicado consiste en una conversación terapéutica orientada a ayudar a la persona a resolver los problemas personales o de relación con los demás que dificultan su salida de la espiral negativa en la que se encuentra.
Se trabaja sobre tres aspectos fundamentales:
A las sesiones o entrevistas pueden acudir quienes deseen participar en la búsqueda de soluciones para ayudar a conseguir los objetivos que se hayan acordado. La duración es variable, oscila entre los 50 y los 90 minutos, aunque cada persona ocupará el tiempo que estime necesario para plantear su problema.
La periodicidad de las entrevistas es flexible, dependiendo fundamentalmente de los deseos de las propias personas que consultan y de lo que sea más aconsejable para el tipo de estrategia terapéutica aplicada. En la mayor parte de los casos bastan con pocas entrevistas para alcanzar cada uno de los objetivos planteados. Se dedicarán tantas entrevistas como se consideren necesarias para conseguirlos.