El juego en la infancia, además de servir para la diversión constituye una actividad indispensable en la construcción de su universo de significados, de vínculos con lo que les rodea, de su relación con los otros y de su personalidad.

Podemos aprovechar los momentos de juego con los niños y las niñas para crear una relación de mayor intimidad y confianza, ayudándolos a vernos como adultos accesibles  y aprovechando además estos momentos de cercanía para establecer con ellos una comunicación fluida.

Para conseguirlo, lo indispensable, introducir los momentos de juego familiar como una parte más en nuestras aceleradas rutinas, otorgándoles la importancia que requieren. Pero no cabe duda que se hace una tarea más sencilla y mucho más efectiva para la mejora de las relaciones familiares, cuando los juegos que seleccionamos también divierten a los padres.

El próximo domingo 16 de Diciembre de 2012 estaré trabajando o quizás deberíamos decir “jugando”, junto con mi compañera la trabajadora social María Riega, en el encuentro de familias acogedoras y adoptivas de la Fundación Meniños.

Meniños es una entidad con un trabajo orientado a garantizar el derecho de todos los niños y niñas a vivir en un entorno familiar que les proporcione afecto y seguridad. En Asturias, desde el año 2000 llevan a cabo el programa “Se buscan abrazos”, para el acogimiento permanente o preadoptivo de niños y de niñas con características especiales.

Aprovecharemos este encuentro de familias para trabajar con las familias y los niños y niñas acogidos las relaciones lúdicas y de ocio.  A través de diferentes juegos y dinámicas perseguimos la estimulación de habilidades comunicativas y relacionales entre los miembros de las familias.

Durante la tarde, ya en un ambiente de tertulia, exprimiremos a fondo a los papás y las mamás, mientras los niños y niñas se divertirán en las manos de nuestros colaboradores habituales, Cometa Verde.

¡Jugaremos!