El papel de la Ética en los modelos de Atención Social
clinicayuremadelafuente
V Jornadas de Ética y Servicios Sociales.
Durante estas jornadas se nos ha invitado a poner en foco en cómo trabajamos y en cómo intervenimos no sólo desde el punto de vista de lo que hacemos sino también de cómo lo perciben los demás.
«Con la mejor intención, en ocasiones, causamos los peores efectos»
Hemos reflexionado sobre el efecto que tienen algunos modelos de intervención en la atención social, llegando a causar sufrimiento en las personas y restando eficacia a los programas, en cuanto a la meta de que éstos contribuyan al Bienestar Social.
Las propuestas elaboradas por los distintos profesionales invitados, apuntan a la necesidad de modelos de intervención altamente flexibles e individualizados, que permitan tener en cuenta todas y cada una de las diferencias individuales de las personas con las que intervenimos.
La mayoría de los ejemplos escuchados fueron dirigidos a la intervención con personas mayores, sin embargo, desde mi punto de vista los análisis realizados son perfectamente válidos para la intervención con la infancia. Los distintos ponentes consiguieron trasladarnos un verdadero análisis de la atención social, independientemente del colectivo/población/características de las personas a las que dirigimos las intervenciones particulares.
El trabajo ÉTICO desde servicios sociales
- El orden de nuestras intervenciones sí es importante:
1º CAPACITAR. Intervenimos con la persona para desarrollar capacidades que permitan paliar los déficits actuales.
2º INTEGRAR. Apoyamos a su medio para que ellos puedan hacerse cargo de las necesidades que se plantean.
3º PROTEGER. Desde la perspectiva de la persona como «valiosa», y llevando a cabo intervenciones que a ella la hagan sentir así, protegemos su esencia a través de cuidados especializados que atiendan sus necesidades.
- Nuestro modelo de relación para la intervención debe de ser RESPETUOSO. Por tanto debemos de prestar atención no sólo a las intervenciones que llevamos a cabo sino también a cómo las llevamos a cabo. La forma en la que llevemos a cabo nuestras prácticas debe de impedir que éstas sean percibidas por las personas a las que van dirigidas como amenazas. Y esto es una responsabilidad que como profesionales de servicios sociales no podemos eludir.
Modelo de atención integral centrado en la persona
Este es el modelo prioritario en el trabajo social en este momento. La persona está formada por toda su biografía, independientemente de las circunstancias que en este momento la rodeen y debemos de incluirla dentro de las intervenciones que con ella planifiquemos. De esta forma no pueden ser intervenciones «receta», no nos servirá el mismo tipo de intervención para distintas personas pues la biografía de cada ser es diferente, está llena de matices particulares.
Así, sus gustos, sus recursos y potencialidades, sus limitaciones…no serán iguales y por tanto nuestra intervención con ellos será NECESARIAMENTE DIFERENTE.
«En la intervención con personas debe primar el método poético frente al método científico» Ramón Bayés.
Ramón Bayés lo define como un método poético para la intervención con personas, en la medida en que ve los problemas humanos como situaciones globales a las que debe hacérseles frente con todos sus elementos. Debemos por tanto entrar en ellas de manera holística como quien entra en una poesía o en una obra artística. Cuánta más experiencia tengamos en ellas mayores posibilidades de afrontarlas mejor.
«La vida de las personas constituye un viaje, nuestro trabajo consiste en acompañar a los viajeros a dónde ellos quieran dirigirse».